Fuerte siloso
El fuerte Siloso, construido en la parte occidental de la isla de Sentosa, es el único testigo sobreviviente de la historia de Singapur que recuerda el pasado militar. Fue erigido por los británicos a finales del siglo XIX para defender la estrecha entrada del mar al puerto de Keppel de los piratas. Durante mucho tiempo, estando a disposición de gran Bretaña, fue el objeto estratégico más importante. En filipino, el nombre del fuerte significa "hombre celoso".
Durante la segunda guerra mundial, la fortaleza de Siloso fue el principal bastión para acercarse a Singapur desde el lado occidental. La fortificación jugó un papel importante para proteger a los británicos de los ataques de los invasores. Para repeler un posible asalto, los británicos pusieron una gran cantidad de armas. Durante mucho tiempo, las armas de artillería de 6 pulgadas defendieron el puerto de Singapur, pero los ataques de Japón aún no pudieron resistirse. Los japoneses convirtieron el fuerte Siloso en un campo de prisioneros de guerra. Los prisioneros de gran Bretaña y Australia fueron detenidos en las paredes de la fortaleza con condiciones insoportables. Muchos, sin esperar la liberación, murieron en el lugar de detención. Hoy en día, los singapurenses, considerando este lugar como un lugar sagrado, celebran días de recuerdo.
Desde 1967, la isla, junto con el fuerte Siloso, pasó a ser propiedad de Singapur. A finales del siglo XX, la fortaleza sirvió como el lugar de detención del famoso político Singapurense Chia Tai Po.
Poco a poco se llevó a cabo una restauración parcial de este objeto defensivo. A finales de los años 80, el fuerte fue completamente restaurado y abierto al público.
El Museo será de interés principalmente para los amantes de la acción histórica. En este Museo se proporcionan muchas armas de tiempos de guerra, desde el siglo XVII hasta las horas de la Segunda guerra Mundial. Los maniquíes de soldados británicos y militares se colocan alrededor de la circunferencia del fuerte Siloso, creando imágenes reales de la vida militar.
Los amantes de las atracciones militares podrán ver almacenes, búnkeres de municiones, cuarteles, pasear por los viejos túneles que guardaban los secretos de la situación militar. A partir de numerosas fotografías y documentos, puede explorar todos los detalles de la guerra, y los guías turísticos que lo acompañan contarán toda la historia de las batallas en la isla de Sentosa.