Castillo de Kumamoto
La historia del castillo de Kumamoto comenzó en el siglo XIV, cuando se ubicó una pequeña fortaleza en su lugar. Kato Kiyomasa, el propietario de estas tierras, decidió ampliar significativamente la fortificación y construyó aquí un majestuoso castillo, que albergaba una gran guarnición militar.
Historia del Castillo de Kumamoto
En 1607, se completaron todos los trabajos de construcción. El castillo de Kumamoto incluía dos muros altos: anillos. La longitud del anillo exterior es de 13 kilómetros, el anillo interior es de 5 kilómetros. En caso de asedio, se prepararon 120 pozos con agua potable en el territorio, además, se plantó una gran cantidad de árboles de ginkgo. Sus frutos fueron planeados para comer, y las hojas son adecuadas para hacer té. Por la abundancia de estos árboles, la fortaleza también fue llamada "Castillo Ginko".
Otro nombre del castillo de Kumamoto está asociado con el color de las paredes. Debido a las barreras negras e inexpugnables, muchas construidas de manera especial, el antiguo fuerte fue apodado el "Castillo del Cuervo".
Durante los dos siglos siguientes, el castillo de Kumamoto sirvió como fortaleza segura. Sus muros, como los muros de muchos castillos en Japón, se construyeron con una tecnología especial, era imposible escalarlos sin escaleras especiales, el enemigo simplemente rodaba por barreras resbaladizas.
Habiendo sobrevivido a varias hostilidades, el castillo cayó a causa de un fuerte incendio que ocurrió aquí a mediados del siglo XIX. El samurái rebelde Saigo Takamori se escondía detrás de los muros de la fortaleza. Ocupó el castillo durante 50 días y nunca se retiró. Después de eso, comenzó un incendio, cuyos resultados resultaron ser devastadores, solo quedaron los cimientos de toda la estructura.
Nueva vida del castillo
El restaurante global se inició ya en el siglo XX. Los japoneses tratan su historia con gran inquietud, por lo que todo el trabajo para restaurar el castillo perdido de Kumamoto se llevó a cabo con mucho cuidado, la tarea principal era preservar la autenticidad tanto como fuera posible. De 49 torres, 13 fueron restauradas y de más de 100 pozos, 17 fueron devueltos a su forma original.
La segunda etapa del trabajo de restauración comenzó en el territorio en 2007. Al mismo tiempo, se plantó aquí toda una arboleda de hermosos sakura. Es interesante que anteriormente estos árboles se plantaron para fortalecer el suelo en los lugares donde se construyeron castillos. Su exuberante floración no jugó el papel más importante, pero fue una adición esencial.
Hoy en día, los huéspedes del castillo de Kumamoto pueden visitar un extenso museo dedicado a su historia, así como a las dos familias que lo poseyeron en diferentes momentos.
El Castillo de Kumamoto es uno de los 12 castillos en el territorio del Japón moderno que se han conservado, son el tesoro nacional del país. Cada año, turistas de todo el mundo vienen a verlos, así como residentes locales que honran su historia.