Plaza Vrijdagmarkt
La plaza Vrijdagmarkt se encuentra en la ciudad belga de Gante, se encuentra junto al Castillo del Conde. En sociedad, la zona se denomina Mercado de los Viernes, la cual tiene una superficie de 1 hectárea. Desde la antigüedad, la plaza ha sido el centro de la vida pública de toda la ciudad: aquí llegaban numerosas caravanas y aquí se realizaban importantes transacciones comerciales entre los residentes locales, las autoridades de la ciudad y los invitados extranjeros.
Breve descripción
La ciudad de Gante es rica en diversos monumentos arquitectónicos, así como en el ambiente elegante y agradable que reina aquí desde hace muchos años. Es aquí donde se encuentran una gran cantidad de centros históricos, uno de los cuales es la plaza Vrijdagmarkt. Aquí todavía se respira un ambiente alegre y ruidoso, con la gente del pueblo participando en diversas ferias y ofreciendo productos tradicionales a la venta. El viernes, el comercio principal es de 7:30 a 13:00, y el sábado, la plaza Vrijdagmarkt y las galerías comerciales abren de 11:00 a 18:30. Los domingos hay mercado de aves en la plaza del pueblo.
Características de la zona
En la plaza Vrijdagmarkt hay una gran cantidad de edificios históricos y esculturas: un monumento a Jacob Artevelde, quien en un momento dirigió el famoso levantamiento del pueblo contra el Conde de Flandes. Uno de los edificios más antiguos ubicados en la plaza es la casa Toreke. El edificio es de estilo gótico clásico y es un verdadero monumento arquitectónico intacto que ha sobrevivido hasta nuestros días en su estado original. Sin embargo, el más popular entre los turistas y residentes locales en la plaza Vrijdagmarkt es la famosa cervecería Dulla Griet. Este es verdaderamente un establecimiento histórico. Fue aquí donde surgió una tradición divertida: el propietario del establecimiento inventó vasos de formas especiales con un soporte de madera, de los cuales, incluso cuando se bebe, es muy difícil mojarse. A la gente le gustaron tanto los vasos que empezaron a llevárselos a casa en secreto. Por este motivo, todavía hay un cartel frente a la entrada que dice que los visitantes deben dejar sus zapatos como depósito antes de ingresar. Ahora la tradición es formal, pero los visitantes de la atracción y de la plaza Vrijdagmarkt la tratan con respeto.