Cueva de Altamira
La cueva de Altamira – es una atracción encantadora que pertenece a España. Ubicada cerca de Santillana del Mar en Cantabria, la cueva ganó popularidad debido a la increíble pintura de piedra policromada, que se remonta a la era paleolítica. Desde 1985, este hallazgo ha sido protegido por el patrimonio mundial de la UNESCO.
Esta área es conocida entre muchos turistas que están felices de visitarla. La cueva de Altamir se encontró en 1869, y se descubrieron pinturas murales durante su estudio unos diez años después de su descubrimiento. Pero en ese momento, la técnica no permitía determinar su originalidad, porque las pinturas estaban tan bien conservadas que se las confundió con falsas.
Después de varios años, durante los cuales se realizó una investigación constante de este hallazgo, sin embargo, los científicos pudieron demostrar su autenticidad.
Las pinturas locales pertenecen a personas antiguas que habitaban este territorio hace cerca de 32 mil años. Hay que decir que los dibujos son bastante detallados y se ajustan con mucho éxito al relieve de la superficie rocosa, con la que producen el efecto de una imagen tridimensional. Aquí puedes ver el hermoso ciervo pintado, que tiene las dimensiones de dos metros de altura. Para la opinión de los científicos, este dibujo sirvió para atraer la vida, algo así como un templo donde los creyentes oraron por una cacería exitosa. Admiten que de esta manera la religión mundial comenzó a surgir.
Al llegar a la cueva de Altamira, sin duda estará satisfecho con estas increíbles pinturas en las paredes, puede apreciar la capacidad de los antiguos para pintar. Este lugar siempre es un clima bueno y cálido, lo que le permite pasar un buen rato rodeado de naturaleza.
Los científicos han demostrado que los dibujos que pertenecen a las cuevas de Altamir y El Castillo se encuentran entre los más antiguos de toda Europa. Afirman que la edad de trabajo es cercana a los 40,000 años, que es hasta 4 mil más antigua que las cifras similares que pertenecen a Francia. Las pinturas murales francesas han sido consideradas durante mucho tiempo las más antiguas del planeta. La era de las pinturas increíbles en la cueva de Altamir se determinó utilizando los últimos métodos y tecnologías, que fueron utilizados con éxito en la práctica por un grupo de arqueólogos liderados por Alistair Pike. Realizaron investigaciones utilizando el estudio de los isótopos de torio y uranio. Este método, que se ha establecido con éxito en la práctica, es de gran valor para tales experimentos, con los que aprendemos mucho sobre la vida de nuestros antepasados.