Nizhny Novgorod Kremlin
El Kremlin de Nizhny Novgorod es la atracción más importante y la parte más antigua de Nizhny Novgorod. La fortaleza, como la ciudad, fue construida para proteger la frontera del país.
Historia del Kremlin
En 1221, el Príncipe Vladimir Yuri Vsevolodovich colocó Nizhny Novgorod, cuya protección al principio sirvió como fortificaciones de madera y tierra. En el siglo XVI, Nizhny Novgorod se convirtió en un importante bastión en la guerra de Moscú contra el kanato de Kazán, por lo que en 1500 comenzó la construcción de la torre de Tver (ahora Despensa). La construcción en 1505 fue interrumpida por el asedio infructuoso de la ciudad por el Khan de Kazán Mohammed-Amin. La construcción se reanudó en 1508, y en 1513, el Kremlin de roble se quemó durante un incendio. La construcción del Kremlin de piedra blanca se completó en algún momento en 1516. El Kremlin fue sitiado en 1521, 1536 y 1574, pero no pudieron tomarlo. En 1697 perdió su importancia como fortaleza defensiva.
La longitud total de las paredes del Kremlin de Nizhny Novgorod es de 2 kilómetros, que protegen las torres 13. En el Kremlin había una guarnición permanente con cañones de fortaleza de pequeño calibre, la cantidad de piezas 20. Además de los cañones, los enemigos fueron disparados con chirridos, y en los sótanos se almacenaron pólvora y armas blancas, en caso de que el enemigo rompiera las defensas. Bajo Catalina II, repararon el Kremlin, durante el cual blanquearon las paredes, pintaron los techos de las torres y cubrieron el foso, debido a lo cual las torres comenzaron a inundarse con agua subterránea y comenzaron a colapsar.
Por cierto, hay muchas leyendas alrededor de la torre del Balancín. Según uno de ellos, durante el asedio de 1520, los tártaros se colaron en las paredes por la noche, pero se encontraron con una mujer que iba a buscar agua. Al verlos, se lanzó con un balancín y mató a diez, pero uno de los enemigos la golpeó con una espada. Al ver lo que había hecho una sola mujer, se asustaron y huyeron de las paredes del Kremlin de Nizhny Novgorod. Según otra versión, antes, para fortalecer el edificio, se enterró un ser vivo en los cimientos, que fue el primero en llegar al edificio. Pasó una niña que quería recoger agua en el río, y fue enterrada viva, arrojando balancines y cubos al agujero.